Ciberseguridad para particulares

Cuidado con el Ciberacoso y el Grooming: Protegiendo a los Más Jóvenes en Internet

El mundo digital es un espacio lleno de oportunidades, especialmente para los jóvenes. Sin embargo, también presenta desafíos serios, y dos de los más peligrosos son el ciberacoso (o ciberbullying) y el grooming. Es fundamental que tanto jóvenes como adultos (padres, educadores) entiendan qué son, cómo identificarlos y cómo actuar para protegerse.

 

¿Qué es el Ciberacoso (Ciberbullying)?

El ciberacoso es el acoso o intimidación que se produce a través de las tecnologías digitales, como redes sociales, plataformas de mensajería, juegos online o teléfonos móviles. Se caracteriza por ser un comportamiento repetido que busca atemorizar, enfadar, humillar o dañar emocionalmente a otra persona. A diferencia del acoso tradicional, el ciberacoso puede ocurrir en cualquier momento y lugar, lo que hace que la víctima se sienta vulnerable incluso en su propia casa.

Ejemplos de ciberacoso:

  • Difundir rumores, mentiras o publicar fotografías o vídeos vergonzosos o humillantes de alguien.

  • Enviar mensajes, imágenes o vídeos hirientes, abusivos, amenazantes o con burlas repetidas.

  • Hacerse pasar por otra persona para enviar mensajes agresivos en su nombre o a través de cuentas falsas.

  • Excluir a alguien deliberadamente de grupos online o conversaciones.

  • Crear perfiles falsos para atacar o ridiculizar a una persona.

  • Comentarios o publicaciones constantes que ridiculizan la apariencia, las ideas o la forma de ser de alguien.

¿Qué es el Grooming?

El grooming es una forma de acoso y abuso infantil que ocurre en línea, donde un adulto (el «groomer») se gana la confianza de un menor (niño o adolescente) con la intención de establecer un vínculo emocional para obtener concesiones de índole sexual. Es un delito grave.

El grooming no suele ser un ataque directo, sino un proceso manipulador que se desarrolla en fases:

  1. Creación del vínculo de confianza: El groomer se acerca al menor, a menudo haciéndose pasar por alguien de su misma edad o alguien mayor con intereses similares. Puede mostrarse muy comprensivo, ofrecer apoyo, hacer regalos (virtuales o físicos), o incluso fingir que tiene problemas similares a los del menor para generar empatía.

  2. Aislamiento de la víctima: Una vez que se ha ganado la confianza, el groomer intentará que el menor mantenga la relación en secreto, alejándolo de sus amigos, familiares o cualquier adulto de confianza que pueda darse cuenta de la situación. Insiste en la necesidad de mantener su «amistad» como un secreto especial.

  3. Introducción de temas sexuales: Gradualmente, el groomer empieza a introducir conversaciones de contenido sexual, de forma sutil al principio, para ir «normalizando» la temática y ver la reacción del menor.

  4. Peticiones de naturaleza sexual: Esta es la fase final, donde el groomer manipula, amenaza o chantajea al menor para que envíe fotos o vídeos de contenido sexual, participe en videollamadas con actos sexuales, o incluso acepte encuentros en persona. Utiliza la información o el material comprometedor que ha obtenido para coaccionar al menor.

Señales de alerta de grooming (para padres y educadores):

  • Cambios repentinos en el comportamiento o el estado de ánimo del menor (más irritable, triste, aislado).

  • Aumento inusual del uso de internet o el móvil, o, por el contrario, un secretismo excesivo sobre ello.

  • Se vuelve reservado sobre sus amistades online.

  • Recibe regalos o dinero de fuentes desconocidas.

  • Muestra ansiedad o incomodidad al hablar de su actividad online.

  • Intenta esconder el uso del dispositivo o borra conversaciones.

Cómo Protegerse y Prevenir: Consejos Clave

Para Jóvenes:

  1. No te quedes callado: Si alguien te molesta, te amenaza, te envía cosas raras o te hace sentir incómodo online, cuéntaselo a un adulto de confianza (tus padres, un profesor, un familiar). No estás solo y ellos te pueden ayudar.

  2. No respondas a las provocaciones: Si te acosan, no entres en el juego. Bloquea a la persona y no le respondas. Responder les da lo que buscan.

  3. Guarda pruebas: Si sufres acoso, haz capturas de pantalla de los mensajes, comentarios o publicaciones. Guarda las conversaciones. Estas pruebas son muy importantes si necesitas denunciar.

  4. No cedas al chantaje: Si alguien te amenaza con publicar fotos o información tuya, no hagas lo que te pide. El chantaje no termina si cedes; solo les das más poder. Pide ayuda inmediatamente.

  5. Cuidado con lo que compartes: Piensa antes de publicar fotos o vídeos, especialmente si son íntimos. Una vez que están en internet, pierdes el control sobre ellos.

  6. Sé muy selectivo con tus amigos online: No aceptes solicitudes de amistad de desconocidos, especialmente si sus perfiles parecen sospechosos o muy recientes.

  7. Desconfía de los adultos que te escriben como un «igual»: Si un adulto se hace pasar por un menor para hablar contigo, o te pide que le guardes un «secreto» de vuestra «amistad», ¡es una señal de alarma muy grande!

  8. Rechaza los mensajes o peticiones de tipo sexual: Si alguien te envía contenido sexual o te pide que se lo envíes, ¡recházalo inmediatamente! Exige respeto y bloquea a esa persona.

  9. Configura tu privacidad: Mantén tus perfiles en redes sociales en modo privado y revisa quién puede ver tus publicaciones.

Para Padres y Educadores:

  1. Fomenta la comunicación abierta: Crea un ambiente de confianza donde los jóvenes se sientan cómodos para hablar sobre lo que les ocurre online, sin miedo a ser juzgados o castigados.

  2. Educa y acompaña: Habla con ellos sobre los riesgos del ciberacoso y el grooming de forma regular y adaptada a su edad. Enséñales a identificar señales de peligro y a proteger su privacidad. Acompáñales en el uso de internet y las redes sociales.

  3. Establece límites claros: Define reglas sobre el uso de dispositivos y el tipo de contenido al que pueden acceder.

  4. Revisa la configuración de privacidad: Ayúdales a configurar correctamente la privacidad en sus redes sociales y aplicaciones.

  5. Estate atento a las señales de alerta: Observa cambios de humor, aislamiento, bajo rendimiento escolar, o si muestran excesivo secretismo sobre su actividad online.

  6. Guarda pruebas y denuncia: Si sospechas o confirmas un caso de ciberacoso o grooming, guarda todas las pruebas (capturas de pantalla, conversaciones) y denúncialo a las autoridades (Policía Nacional o Guardia Civil). Es un delito.

  7. Busca apoyo profesional: Si un menor ha sido víctima, considera buscar apoyo psicológico o legal para ayudarle a afrontar la situación.

Recursos Adicionales y Dónde Pedir Ayuda:

  • INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad de España):

  • PantallasAmigas:

    • Organización dedicada a promover el uso seguro y saludable de las nuevas tecnologías entre niños y adolescentes. Tienen mucho material educativo.

    • Enlace: https://www.pantallasamigas.net/

  • UNICEF España – Ciberacoso:

  • Save the Children – Ciberacoso y Grooming:

  • Policía Nacional / Guardia Civil:

    • Denuncia online: Es fundamental denunciar estos delitos. Puedes acudir a comisaría o, en algunos casos, iniciar la denuncia online.

    • Contacto (Comisarías y Puestos): Busca la comisaría o puesto más cercano en sus páginas web oficiales.

Educar, comunicar y estar alerta son las herramientas más poderosas para proteger a los jóvenes en el entorno digital.

"El acoso cibernético es un problema creciente que debe tomarse en serio, y la prevención es la clave"

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